sábado, 30 de octubre de 2010

Otoño Ahora.


Llego el otoño por la ventana destartalada de la pasión. La hojarasca del vendaval de su vida , fue cayendo sobre sus dias y en las noches era barrida por el sueño del olvido. Septiembre moria en sus manos, la pasion apagada por el peso de los años, rebrotaba por el simple amor a Eva. Otoño en las sienes marchitas del pensamiento. Marco nunca tubo tiempo para el amor. El huracan de la inconsciencia lo tubo haciendo remolinos sobre si mismo, sobre su afan de matar el recuerdo, retenido en el tiempo.....al final, Marco quedo tendido, exausto, fustrado. Las noches oscuras de octubre fueron apagando las velas que iluminaban los anelos de Marco y solo la lampara tenue de Eva, mantenia la casa iluminada. Fuera , en el abismo, una tormenta que se alejaba, de vez en cuando , el flax intenso de un relampago desdibujaba su rostro y el trueno le palpitaba en su estomago. Dentro , un corazon endurecido por la sequia del amor, una promesa de la cual Marco, no se acordaba. Eva rompio la ventana fragil del deseo y se instaló en su dormitorio. Otoño ahora, otoño en las estancias vacias del recuerdo. Otoño en la noche mas oscura de noviembre. Noviembre en las sabanas blanqueadas por la pasion renacida. Eva se instaló en su almuada y el beso de sus labios transpaso el tiempo del recuerdo. Marco abrio sus ojos y beso a Eva entre sabanas humedas de lluvia dormida. El suspiro de diciembre trajo el olvido y la noche mas oscura apago todas las estrellas. Era tarde, la noche de otoño, la noche mas profunda le dejo dormido y Eva suspiro su aliento, el ultimo aliento del otoño. y de pronto....era invierno.

sábado, 23 de octubre de 2010

Tras la Niebla.


Marco esperaba, consumiendo su ultimo cigarrillo, en la vieja estacion de trenes de la ciudad. La paciencia , tantas veces puesta a prueba, se consumia con cada calada. Eva no llegaba, Iban a dar las diez en el reloj de la estacion y el tren estaba a punto de partir. Marco recordo en un instante, en cada inalacion y exalacion del humo viscoso de tabaco, su amor por Eva y su anelo de amarla hasta la muerte. La vida se mostro esquiva con él, a sus cincuenta años le llego el amor, un amor joven y angelical.Amor a trompicones, en la batalla de la conquista del corazon de Eva. En el altavoz ,de la sucia estacion de provincias, anunciaba la inminencia de la salida del tren que Marco tomaria para nunca volver a esta ciudad. Su cigarrillo, todavia sin consumir, se aferraba a sus dedos. Recordo el primer dia que la conocio, un atardecer de otoño. Marco buscaba habitacion en la ciudad y Eva se la ofrecio en su casa. Tomaron un té y la sonrisa de Eva penetro en su alma y marco su destino. El jefe de estacion revisaba el tren, para dar su salida en breves momentos. Marco miraba, nerviosamente con sus ojos, todas las puertas por donde Eva no aparecia. La colilla de su cigarrillo quemaba sus dedos. Amores imposibles, penso Marco, mientras sus ojos se inundaban del recuerdo de la imagen de Eva. Eva se lo dijo muchas veces- Nuestro amor no tiene futuro, somos generaciones diferentes, yo soy guapa y joven, quiero tener hijos, proyectarme en el tiempo-. Marco quedo congelado ante los pitidos de un tren a punto de partir, la colilla de su cigarrillo se habia apagado. La esperanza de irse con Eva, se esfumaba con el ultimo humo que exalaba por sus labios. Marco salto en el tren en marcha, busco su billete, lo miro,comprobo que su numero de coche era tres vagones mas atras. Marco, sin respiracion aparente, quedo petrificado, su cuerpo andaba como un automata. Su mente se lleno de la emocion mas amarga: la Soledad. Una vida que intuia acabada y sin el amor de Eva. Tropezo, torpemente, con el revisor y este le indico el asiento donde deberia sentarse. El mundo desaparecio para Marco y el vacio absoluto ocupo su lugar.Abrio la puerta del vagon, el amor a Eva pesaba toneladas en su alma, Marco se sintio morir en vida. El vagon le parecio un ataud mugriento y oscuro. Sintio que el tren le transportaba a la otra orilla, al limbo amargo de la existencia.Al llegar a su asiento levanto sus ojos apagados y volvieron a brillar, su piel se volvio del reves, su estomago palpitó al ritmo que el corazón se aceleraba. El tren tomo su maxima velocidad y la luz se hizo en el vagon. Eva estaba , alli, sentada.

domingo, 17 de octubre de 2010

Gotico Sur


Las esquinas de la vieja ciudad lo vieron crecer y en una de ellas hizo su casa. Noor llego al Gotico de Barcelona hace treinta años y en el devenir de las desgracias humanas. lo arrastraron a la cloaca maloliente de las drogas, el estres de los callejones sin sol y al contacto de las paranoias del mal vivir.La policia secreta lo conocia muy bien y en varias ocasiones visito el gran hotel de los pobres: la carcel. Noor era la personificacion del indocumentado, nunca se preocupo por su residencia en el pais y olvido su pasaporte marroqui. Noor nacio en una ciudad blanca del norte de africa y desde niño soño ser artista, un ruiseñor del teatro. Cruzo el estrecho para abrazar el placer de las cosas prohibidas, para dejar atras un mundo estrecho y petrificado. Su origenes judios, su formacion mulsulmana no llenaron sus ansias de volar y el vuelo de lo prohibido lo arrastro al sucio subproducto de la delincuencia, de la sucia calle, y los centros de desintoxicacion. Paseaba por el Gotico , su maltrecho cuerpo, sus ojos saltones y su sonrisa desdentada, en busca de un placer rancio que lo elevara a la categoria de Dios, de Actor, de Adonis. Noor era el sucio ejemplo de los esquineros del Gotico Sur. Africanos vendedores de marihuana, magrebis trapicheros de cocaina, esquineros de drogas baratas y Paquistanis e hindus, lateros, vendedores de cerveza.En el Gotico Sur florecian en cada esquina , un personaje, una obra humana repleta de huida hacia adelante. El olor a podrido salia de las cloacas y los regueros de meados hacian una atmofera que Noor reconocia como parte de su territorio. La peste negra se extendio por el Gotico Sur, la peste del mundo moderno: el turismo. La Rambla, en otro tiempo simbolo de la ciudad, habia sucumbido a esta terrible enfermedad. El virus del turismo la mato y la convirtio en un parque tematico.La ansiedad corrosiva de consumidores de placeres rapidos y baratos se extendio como la marabunda. Un ejercito armado de camaras flaxeantes, con los bolsillos llenos de la putrefaccion del dinero.La ansiedad de lo inmediato hicieron del Gotico Sur un cementerio de cadaveres, una batalla sin cuartel. la mierda se convirtio en la belleza.La oscuridad del dia le seguia la ceguera de la noche. La peste negra atrajo a los carroñeros de todos los paises. Trileros de la fortuna rapida. Carteristas de los bolsillos ajenos. Vendedores de reliquias sagradas y objetos de culto.Charlatanes envaucadores de la noche. Traficantes de pocimas magicas. Quietistas, inmoviles ante los flaxes, risas de italinos maleducados, ingleses borrachos y estupidos y mirones de todos los continentes. La noche del Gotico se llenaba de zombis, muertos vivientes que recorren la noche mas loca y volatil de sus vidas. La comedia humana comienza con el sabor rancio de la oscuridad de la noche, da desinibicion del alcohol y las drogas, el deseo imperioso de conquista. Noches Goticas embueltas en el humo de la marihuana, noches de estrellas en una raya de cocaina. Noches olvidadas en un vaso vacio de ron. El sur se extiende por el gotico, todas las tribus reunidas para una gran batalla: la inconsciencia.

lunes, 4 de octubre de 2010

Diagonal Zero.


A su edad madura, le embolvio la niebla del amor, del amor no correspondido, se hizo adicto a sus emociones y se dejo deslizar en las manos de un destino que intuia naufragio. Aquellos edificios , de reciente construcion, le eran , ya , familiares. Rascacielos suntuosos con nombres exoticos, con pretensiones de una nueva metropolis. Diagonal Mar estaba dirigida por amplias avenidas y en sus orillas , centros comerciales, el Forum de las culturas, hoteles que rozaban el cielo, y una gran plaza de proporciones ciclopeas, vacia y solitaria. Las hierbas hacian ranuras en sus adoquines, una plaza nacida muerta, llena de melancolia, abocada a un mar pedregoso de cubos de ormigon. Paseaban por la rambla del Prim, cada uno arropado por el mundo construido por su propia locura y entre ambos un muro de cariño , levantado con las manos de un tiempo feliz. Eva era prisionera, a sus treinta y tres años, de su propia mente bipolar y era libre en sus sueños, sueños de mariposa que desparramaba en los corazones que lobraban tocarla. Marco navegaba en un mar de contradiciones, mar picado por las emociones y su ansia de proteccion.La pasion lo empujaba a darse todo el. Darse hasta la vacuidad del alma.La rambla del Prim los vio juntos, los arboles botella, los plataneros, los cipreses, acogian a dos forasteros, que hicieron su nido en el Zero de esta Diagonal, de esta rambla surcada por un tranvia que se deslizaba por un cesped fresco y verde. Diagonal Zero los vio crecer desde un amor ambiguo , a una amistad estable. Eva vivia en la habitacion 5032 de el centro Forum-hospital del mar, fue ingresada por la inconsciencia de un mundo inestable y agresivo. Replego sus alas de mariposa para entrar en la melancolia de la medicacion. La quinta planta del siquiatrico contemplo su resplandor, su hermosura, sus ojos apagados por la quimica de la salud. Sus brazos extendidos , temblorosos buscando el abrazo de la vida. La rambla del Prim los veia pasear, las nubes se amontonaban de melancolia , y Marco desplegaba sus palabras llenas de esperanza, miraba los ojos de Eva, y en ellos encontraba mundos perdidos, sueños volatiles, la tristeza del universo. Se sentaban en la terraza del bar del chino Luis, ella pedia zumo de tomate y el, una clara de cerveza. Dejaban , que las nubes ennegrecidas de un otoño temprano, pasaran dejando sus lluvias , sus lagrimas , que encharcaban sus almas de agua, de espejos rotos, de corazones dibujados en el reflejo de los charcos. Eva habia desaparecido en su mundo interior, un mundo donde Marco la acompañaba para protegerla de una ciudad dibujada de obtaculos, de semaforos y señales que Eva no comprendia. Para acompañarla y entrar en el mundo que Eva dibujaba en su alma. Marco se relantizaba y abria todas las puertas de la percepcion para conectar con las emociones y sentimientos que Eva transmitia en su ritual diario. Fueron a las playas para bañarse, desnudos, con los rayos del sol, con la brisa del viento, con la energia de las olas del mar. Eva tenia un cuerpo musculado, una belleza de angel y un espiritu de amazona. Sus incursiones en los elementos basicos la hacian renacer de sus propias cenizas. En su deambular por la ciudad, tropezaron con la muerte. El cementerio del Este. Recorrieron las hileras de nichos, tumbas solitarias de una tarde de calor, en la soledad de la muerte, en la iconografia de angeles , fotos , flores y panteones goticos. Eva hablaba con los angeles y se sentia rodeada por un mundo vivo y olvidado por el frenesi de lo cotidiano. Recogieron dos angelitos de escayola , perdidos en un rincon , entre los matorrales. Y sintieron la Soledad de los muertos, la Soledad de los vivos, la confusion del devenir de los cuerpos y la inmensidad de las almas. Se cogieron de la mano y se abrazaron para fundir tanta Soledad. En el Zero de esta Diagonal, que cruza la ciudad, Marco encontro su nuevo hogar, su viaje particular y se perdio en un cuento urbano de enfermos y enfermeros , de mundos perdidos en la memoria del ser humano. En la quinta planta del siquiatrico fue uno mas, iba todos los dias buscando el renacer de Eva y Eva renacia en las manos de Marco, en las perpectivas de una mente bipolar, en el corazon ensanchado por el peso de la vida. Su cuerpo , encogido por la quimica del litio y los ansioliticos, se embellecia por la fuerza del amor , Eva era fuerte en su interior y perdida en lo exterior. Marco hizo su cuarentena, su sadhana en el Zero de la Diagonal, sanaba su alma con su entrega a Eva. El otoño cruzo sus corazones y los hizo maduros. Nacio entre sus manos la hija esperada por ambos: el amor, el simple amor sin proyecciones. La hija invisible que amamantaba Eva y cuidaba Marco, como fruto de una Sadhana intensa , que rompio aguas en Diagonal Zero. Eva se iba por los mundos superiores de la repeticion y Marco, con su voz apaciguadora, la retornaba a la tierra y a la cordura de lo conocido. Lo inevitable, fluyo por las avenidas de Diagonal Zero,y la deriba de un barco sin rumbo, escoro en la quinta planta del centro siquiatrico. Entre la locura y la cordura de uno y otro, nacio un eden desvinculado del pecado original y Eva con su fantasia y Marco con su pasion , unieron las manos en aras de un mundo nuevo, desvinculado del ruido y la zozobra de este otro.