El Viejo Avion

Erase una vez un viejo avion que cruzaba los oceanos. Los continentes lo veian aterrizar con su abultado vientre lleno de enjambres de pasajeros. El comandante Martinez era su mejor amigo y lo conducia por alturas que rozaban el cielo.
---El comandante Martinez les desea un feliz vuelo, este avion veterano , les conducira a su destino.
Contemplaba el avion pasar las nubes blancas por debajo de sus alas, el viento sobre su morro le hacia suspirar mas fuerte y alli abajo, en la lejania el gran oceano con sus aguas llenas de olas, llenas de inmensidad.
Por las noches , el vuelo se hacia tranquilo y en su viejo vientre dormitaban aquellos seres que soñaban con playas doradas y el viejo avion sentia en su estomago el cosquilleo de la felicidad.
---El comandante Martinez les desea feliz sueño.
La luna llena guiaba la noche en la tranquilidad de un espacio plateado, el viejo avion parpadeaba con sus luces y entornaba sus ojos y se dejaba caer en el profundo sueño.
Veia los aeropuertos que lo esperaban con sus pistas abiertas, para acogerlo en la madre tierra.
Veia las ciudades con sus luces encendidas como fuegos en una selva negra.
Veia las bandadas de aves que cruzaban el cielo imitando su figura, en formacion aerea.
El sol salio timidamente por el lejano Oriente , dorando sus alas, esparciendo la luz por el Universo, y la noche acabada se fundio con el amanecer azulado del dia.
--- El comandante Martinez les desea a todos buenos dias.
El viejo avion y el veterano comandante Martinez intuian sus dias de vuelo acabados. Nuevos y relucientes aviones surcarian los oceanos, con comandantes jovenes y expertos en la ingenieria mas avanzada.
En el ocaso de sus dias, en el ocaso de un sol grande y anaranjado se diviso la gran ciudad y mas alla, rompiendo con el mar, la linea fina y continua de la pista de aterrizaje del Prat de Barcelona.
--- El comandante Martinez les da las gracias y les desea feliz estancia.
La torre de control fue testigo del milagro.
Una gran gaviota aterrizo sobre la pista con sus alas estendidas, tomando tierra, corriendo con sus patas. El viejo avion freno su alma de chatarra para convertirse en el corazon de una gaviota sublime.
En el viejo puerto de Barcelona se ve al excomandante Martinez dar de comer a las aves, y a una gran gaviota , planear en vuelo rasante sobre su cabeza.